sábado, 13 de octubre de 2012

Welcome back to 90's

Estaba dándome una vuelta por la web de VOGUE, y cuál ha sido mi sorpresa al encontrarme con una tendencia totalmente acorde con los looks de los 90.


Este otoño vas a tener que proporcionarle un lugar privilegiado a una de las prendas más usadas en la historia de la moda. La sudadera. Y no solo podrás ponértela con unos vaqueros y unas deportivas, sino que vas a tener que mezclar. Esta temporada se lleva arriesgar, con sudaderas de corte retro-futurista con ilustraciones cinematográficas, algunas de estética retro o incluso las sudaderas más sencillas. No hay fronteras. Y ahora vas a poder mezclar tu sudadera favorita con una falda de tubo, por ejemplo.
Puedes darle el toque final a tu look con un bolso de mano.





¿Qué opinas acerca de esta nueva tendencia? ¿Vas a atreverte con ella? 
Yo, como buena adicta a las sudaderas desde que alcanzo a recordar, estoy deseando llenar mi armario con nuevas prendas, y rescatar algunas que llevan acumulando polvo en el fondo desde hace años. 

miércoles, 10 de octubre de 2012

Este mundo basura de "igualdad".

Esta sociedad está cada vez más centrada en la perfección estética. En personas con un aspecto atlético, o delgado, más allá del aspecto saludable o feliz. ¿En qué tipo de mundo vivimos? No sé hasta qué punto podremos soportar que los medios de comunicación nos enseñen a un estereotipo de persona perfecta. Las personas delgadas, entran en este mundo, y las que no, tienen que comprarse mil artículos de belleza, que realmente no sirven para nada, tienen que hacer mil dietas exprés, sin ser realmente conscientes de sus efectos rebote, o de las consecuencias que éstas van a tener en su salud. Tienen que comprarse este tipo de pantalones, que le disimulan más las cartucheras, aunque no sean realmente los que más te gusten. ¿Queremos realmente esto? Estamos llegando a un extremo en el que las personas que no se ajustan a ese estereotipo, viven infelices y amargados por conseguir ese cuerpo "perfecto".
Todo este mundo basura, como a mí me gusta llamarlo, afecta aún muchísimo más a las mujeres. ¿Alguna vez habéis visto a un hombre protagonizando un anuncio de algún producto adelgazante? Ya os respondo yo; no. Claro que no, porque la mujer, en este mundo de "igualdad" sigue estando mucho más en el punto de  mira. 
Y, ¿qué merece más la pena? ¿Adelgazar una talla de pantalón, o poder disfrutar de una tarde de cervezas, o chocolate con tus amigas? Poder ir a cenar con tu chico por ahí y no preocuparte de cuántas calorías tendrá la cena que vas a comer, ni de cuántos días de gimnasio supondrá este "exceso".
Poder ir a una entrevista de trabajo orgullosa de tu cuerpo sano y feliz, y de tus capacidades para ese puesto, y no entrar preocupada e insegura por la chica de talla 34 y escote de vértigo que está esperando en la sala de espera para enfrentarse a esa misma entrevista.
Y, sobre todo, quererte cada día al despertarte y  mirarte al espejo, despeinada, sin maquillar, pero con una gran sonrisa. 


¿Tú alguna vez te has visto presionado/presionada por esta sociedad materialista y centrada en lo estético?

martes, 9 de octubre de 2012

Olivia Palermo


Me he quedado enamorada de este outfit de Olivia Palermo. ¿No te apetece ya ver looks de invierno? Yo estoy deseando pasear por la calle con una bufanda, un jersey gordo de lana, unas castañas calentitas en la mano y a mi chico de la otra. Así que nunca es tarde para empezar a coger ideas de aquí y de allá. Y quién mejor para coger inspiración que Olivia, que es una de las más trendys del momento, y sus elecciones son siempre perfectas. Así que, espero que para ti también resulte interesante este look. 

Y a ti, ¿quién suele servirte de inspiración?

O, por lo menos, la más feliz.

Cada día tengo más claro que todo aquello que necesitas está siempre a tu alcance, aunque no puedas verlo. Y, a veces, la dificultad reside precisamente en eso, en saber mirar. Qué sencillo. Enfocar bien tu mirada, centrándote en todo lo que tienes alrededor. Suena fácil. Pero, ¿lo es?. ¿Es esto también así en las relaciones? Es posible que no pueda hablar de una manera objetiva, ya que, personalmente, lo que siempre he querido en una relación, estaba muy cerca de mí. Camuflado por una fuerte amistad, muchos secretos compartidos, y cientos de sonrisas robadas. Quizás demasiado cerca. Esa persona con la que he convivido desde que soy capaz de recordar. Hemos crecido juntos, reído, llorado, jugado, discutido... Hemos compartido nuestros innumerables fracasos sentimentales. Posiblemente, porque estábamos destinados a compartir también los triunfos. Un triunfo común. A compartir esas tímidas sonrisas que se escapan entre los besos. Esos momentos de intimidad que nunca creíamos haber compartido. Domingos por la mañana abrazados entre las sábanas, viajes en coche hasta el fin del mundo, o conversaciones hasta altas horas de la noche. 
Y yo, a pesar de estar feliz de compartir mi vida con mi mejor amigo, me pregunto, ¿es esto real? o, ¿simplemente somos demasiado compatibles y nos resultó "poca cosa" la amistad cuando apareció entre nosotros la tensión sexual?. ¿Se le puede llamar amor?. 
Al principio de mi relación me pareció imposible que alguien que me conocía tan bien pudiese llegar a ser mi pareja, y compartir mi vida para siempre. "Para siempre"... Parece muchísimo tiempo, pero es que cada vez me parece más, y  más corto. No me imagino mis desayunos sin su "buenos días" de recién levantado, ni mis noches en pareja sin sus besos en mi espalda. Y sobre todo, no me imagino a mis labios besando a nadie más. 
Pero, como dicen, todo tiene su final. Y lo que más me preocupa de todo es en qué quedará nuestra amistad de cuando teníamos 10 años. En el caso de que todo termine, ¿podremos volver a compartir nuestros fracasos amorosos, o nuestra ilusión de un nuevo encuentro? Es algo que me tiene preocupada. Pero que olvido absolutamente cuando mis besos le parecen demasiado cortos, o mis sonrisas demasiado tímidas. Cuando consigue hacerme sonreír en medio de una discusión. O cuando hace que me sienta la única mujer del mundo. O, por lo menos, la más feliz. 
Esto, que empezó por casualidad, y que, hoy por hoy, es la mejor casualidad de mi vida. Tú, yo y nuestro pequeño mundo, que cada día es más grande, y nosotros más pequeños. 


Y tú, ¿alguna vez has tenido un romance de cuento de hadas con quien menos esperabas tenerlo?